lunes, 30 de marzo de 2015

Victoria (Primera Parte)

Era ligeramente superficial  el contacto establecido que se promovía entre ellos, ella intentaba no dejar manchas de tinta en los recuerdos, ni la marca de un borrador brusco, la ingenuidad fingida, y e odio sincero camuflado en ocasos puntos de indiferencia correspondida.

 Mintieron cuando me dijeron que enamorarme de un escritor era lo mas maravilloso, no fue así, fui cambiada y remplazada por hojas de papel ácidas quemadas por la amargura de la tinta... Es doloroso, mis ojos se arrinconan para que no  vean la secreción de pesadumbre que me cubre, el solo me ve como el lecho de su lujuria,
Recuerdo cuando me perseguía hambriento, y me embriagaban sus palabras... aquel tiempo en que la lluvia fría recordó a mi piel, lo mucho que necesitaba de la suya para no morir de frió, y renacer ardiendo entre glaciares parciales, pero ya no... la lluvia me quema, es molesta, me ahoga en principios burletes de mi propia existencia, no manejo mi tiempo, ni mi cuerpo, mi corazón late encapsulado por la simple necesidad de servirle a el, la humedad de la lluvia me recordaba la dulce sensación de dicha al besarle y sentir su ser, pero ya no es así, recuerdo cuando me hacia sentir la mujer mas hermosa de mundo, al menos para el, recuerdo con nostalgia y ardor en las pupilas que ya no me ame como me lo prometió, pero sin embargo sigue aquí diciéndome lo mismo de todos los días... de todas las noches... de tantos años... Aun eres mi musa astral, y así mismo la caída del sol, me permite ver, necesito tu luz, para poder amar otra vez, cantar de alegría, pero no percibe que la luz es muy oscura para distinguir los rasgos, y los sonidos muy distorsionados para darle alegría, puedo estar vacía y mas fría que un copo de nieve, pero aun siento. Lamento no reflejar esa mirada brillante que tanto le gustaba, lamento no ser el prototipo de belleza que lo enamoro, usted no cultivo lo que amaba de mi, sino que lo arranco de raíz para cultivar algo nuevo, las flores no se mueven, pero también sienten dolor cuando alguien le arranca los pétalos, ahora es el momento en que me siento como una idiota al seguirle, si tuviera la oportunidad de retroceder el tiempo, y escogerlo de nuevo... Lo haría, me acerco optimista de decirte, lo que significa para mi y me responde con un insulto o con la amenaza tajante de siempre, luego entiende mi intención y se disculpa, ocasionalmente bajo la mirada y asiento con la cabeza, y salgo de la habitación. Siempre es igual no me queda mas que aceptar por eso hoy me atreví a tomar su maquina de escribir y redactarle lo que siento, por que ya tampoco me escucha, seguiré jugando su juego, hago lo que puedo por expresarme bien, quiero estar a su estúpido nivel amor mío, definitivamente enamorarme de un escritor no me hizo feliz, pero tu infelicidad me hizo escritora.


Cuando el entro a la habitación leyó lo que su amada dejo encima del escritorio, la busco en toda la casa, y solo su perfume se sentía,  cuando se fijo estaba sentada en el jardín casi desnuda mojada, helada, sosteniendo una pluma y una vieja libreta.
- ¿por que estas aquí? dijo el asombrado por la escena -Siéntate la historia es larga...